-Conduce rápido, no me gustan los túneles.
Víctor pisó el acelerador, y el coche comenzó a devorar el asfalto.
-Más rápido, tengo miedo Víctor - Titubeó Catalina, con el miedo en las pestañas. Puso las manos en el asiento y clavó las uñas con fuerza, cerró muy muy fuerte sus ojos, pero el miedo no se iba, pensó en satélites, en besos de madrugada, en el zumo de naranja y limón recién exprimido de cada mañana, pero el miedo se había acomodado, había mullido su hombro izquierdo, y había gritado muy alto que no se marcharía de allí.
Catalina apartó las manos del asiento y se desató el lazo rojo que llevaba en el cuello, lo estiró, lo dobló, se lo puso de tal manera que no pudiese ver nada, ni túneles, ni luces, ni tan siquiera a Víctor, que la miraba por el retrovisor asustado, y volvió a anudárselo.
-Catalina cielo, ¿qué haces? Quítate el pañuelo de los ojos, ya veo la luz, y ¿Sabes? Al otro lado del túnel parece que brilla el Sol.
Pero Marina negó con la cabeza.
-mmm...... no Víctor, no me lo voy a quitar, no me lo pienso quitar hasta que me lleves a un sitio bonito, tan bonito como el vestido que llevo puesto hoy, y cuando lleguemos, me deberás bajar del coche como a una princesa, y cogerme de la mano como a una princesa, y besar, besar... como al amor de tu vida, entonces, entonces sí que me quitaré el pañuelo.
El miedo, se sintió tan asustado, ¡Ya nadie le hacía caso!, así que de un salto casi espacial se escapó por la ventanilla del coche y se quedó en el túnel, esperando lanzarse a algún neumático, y trepar.
miércoles, 6 de enero de 2010
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Me ha encantando la historia. El miedo nos hace hacer cosas irracionales. Nos paraliza y nos impide ver las cosas con claridad. ¿un poco como el amor, no?
ResponderEliminarBss.
La verdad que me encantó la historia, es realmente bella, porque el miedo, nos impide ver cosas que son demasiado evidentes, pero que muchas veces se esconden...
ResponderEliminarBesos :) te sigo^^
Me ha encantado ^^
ResponderEliminar& tu blog,
así que te sigo, ¿vale?
¡Un beso!
Eh, a esta chica se le pegan las cosas a cuerpo demasiado fácil, no? Pero yo tb tengo miedo muy a menudo, gran idea para saber como quitarmelo de encima.
ResponderEliminarPrecioso, como siempre =)
HHHai a mi me gusta como combinas los textos con las imaágenes :) , GGracias por tu comentario!, te siigo :)
ResponderEliminarñiñiñ... gracias!! ^^
ResponderEliminartambién me gustó la historia del miedo asustado!
y para nada servía ese miedo, ¿no? :)
ResponderEliminarNormal que asusten los túneles...
ResponderEliminarsobretodo cuando se apaga la música de la radio dentro de ellos, uf uf
Te agrego aquí que no te tenía ;)
Se llama como yo :)
ResponderEliminarOhh! A mi en cambio me encantan los túneles! Sentir el frio poderoso de la montaña mientras la surcamos por debajo. Y ver que el sol ya no molesta a los ojos y solo ver pequeñas lucecitas entre las rocas. Una oscuridad cómoda y relajante :)
ResponderEliminarte sigo
el miedo mueve...y mata.... y muchas cosas mas.
ResponderEliminary los túneles..a veces desearía cavar uno.
Con el miedo en las pestañas.
ResponderEliminarViva
A mí las 'Marinas' me dan más miedo que los túneles mismos.
ResponderEliminarMe encanta tu blog!
ResponderEliminarAsi que de Asturias eh!Lo mejor de España jeje.
Te sigo ;]
A mi por el contrario siempre me han gustado los tuneles*
ResponderEliminarPor esto del equilibrio de entre tanta luz un poco de oscuridad*
besosdulces*
Nunca está de más tener un poco de miedo cuando tienes a alguien al lado que vaya a protegerte.
ResponderEliminarUn beso (:
Suelo tener miedo muchas veces...Y esa es una gran forma de espantarlo =)
ResponderEliminarGenial relato!
muy tierna historia
ResponderEliminarun abrazo, reina ;)
tienes un gran tema de Air colgado
ResponderEliminarcerrar los ojos y dejarle llegar, y dejarle quererte.. no se como el miedo se pudo asustar de algo tan envidiable como eso :)
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